

UVAS AUTÓCTONAS RIOJANAS
Es nuestra apuesta por lo genuino, por las variedades propias que históricamente se han cultivado en La Rioja. Siempre tierra de grandes blancos que fue decayendo por la inmensa demanda de tintos durante la segunda mitad del siglo XX. 3 de esas variedades están presentes en nuestros viñedos y son la materia prima sobre la que edificamos nuestros vinos.
TEMPRANILLO
Considerada autóctona de La Rioja, es la variedad más característica de esta Denominación, fundamento de la identidad de sus vinos tintos y una de las grandes variedades nobles del mundo. Ocupa más del 75% de la superficie de cultivo y es enológicamente muy versátil, capaz de producir vinos con largo envejecimiento, muy equilibrados en grado alcohólico, color y acidez, y con un paladar franco, suave y afrutado, que evoluciona a aterciopelado cuando envejece. Respecto a su comportamiento agronómico, es muy segura en el cuajado, muy sensible a plagas y enfermedades, poco resistente a la sequía y a temperaturas altas y, como su propio nombre indica, es “uva temprana” con ciclo corto de maduración.
GRACIANO
El Graciano es una variedad autóctona muy poco extendida en otras zonas, cuya demostrada complementariedad con el Tempranillo para el envejecimiento le ha convertido en una variedad de futuro para La Rioja, donde la superficie de cultivo ha aumentado considerablemente en los últimos años, aunque sin alcanzar el protagonismo que tuvo antes de la filoxera. Requiere suelos arcillo-calizos de cierta frescura y presenta una cierta resistencia a enfermedades como mildiu y oídio, siendo de baja fertilidad y de maduración tardía. Ofrece vinos con importante acidez y contenido polifenólico, ideales para la crianza, cuyo aroma es muy peculiar, superior en intensidad al resto de las variedades de La Rioja
VIURA
Variedad más conocida de La Rioja. Los grandes vinos clásicos se han elaborado con esta variedad. Elegida por su carácter y versatilidad. Da vinos de muy buena acidez y magnífica capacidad de envejecimiento. Gran mineralidad. Su paso por barrica refuerza todas sus virtudes.
Los vinos blancos jóvenes con Viura son vinos frescos, florales y aromáticos si se vendimian temprano y la crianza se realiza en acero inoxidable, pero pueden conseguir cuerpo y notas a miel y frutos secos cuando han pasado por crianza en barrica y se han vendimiado estando la baya más madura. Estos vinos con Viura, envejecidos en madera, constituyen la elaboración tradicional de los clásicos vinos blancos con barrica de La Rioja.
